Entre amigos
Francia. 2015. 90 m. (7). Comedia. Director: Olivier Baroux.
Intérpretes: Daniel Auteuil, Gérard Jugnot, François Berléand, Zabou
Breitman, Mélanie Doutey, Isabelle Gélinas. Salas: Groucho y Peñacastillo
Crispada, desigual y siempre al borde del naufragio, esta comedia coral, cercana a la astracanada, con mar de fondo y escenario único marinero, se mantiene a flote gracias a su reparto. Afrancesado retrato de parejas en el umbral de la vejez, la marejada de conflictos, miedos, prejuicios, frustraciones y cuentas pendientes asoma durante una travesía mediterránea vía Córcega, tan movida en lo marino como afectada en lo emocional de su tripulación. Si para subrayar la amargura escondida en los personajes hacía falta buscar la coartada de una tormenta casi perfecta, la banalidad y frivolidad del planteamiento es absoluta en lo facilón. Los estereotipos de estas criaturas desatadas en sus complejos aburguesados con aire de no romper un plato, son de catálogo de Ikea, con perdón. Perfiles como el marido ensimismado en su ego, la mujer que se siente vacía y devora la comida, la joven recién llegada, torpe pero con tendencia a sacar los colores a los supuestos maduros que la rodean…, todo compone un nudo bastante falso que nunca llega a trenzarse. Cabe algún monólogo con sabor a verdad, pero en general resulta patético el empeño por construir un dramedia embarcándose en un yate cinematográfico tan endeble. De los reproches a las manías, del
vodevil a la farsa. ‘Entre amigos’ es una constante hipérbole pasada por agua través de un desencuentro sobre la amistad, la nostalgia y el balance de cuentas sentimentales. Es una comedia con barriga que acaba convertida en un campamento de verano de mayores adolescentes. Olivier Baroux, muy teatral, con tendencia al retrato cómico, la caricatura y la brocha gruesa en su uso del humor, firma esta trama convencional y trillada, tan verbal como gestual. Abundantes chistes y juegos de palabras o sentencias repetidas con sabor rancio, entre aspavientos y sensaciones de ridículo. ‘Entre amigos’ son tres parejas envueltas en la desconfianza que subyace pese a cincuenta años de amistad. Zonas ocultas, penumbras entre los lugares comunes y muchas escenas de gallinero en altamar y tentando a la zozobra. Daniel Auteuil y Gérard Jugnot, pese a caer en la trampa de la comedia fácil y alborotada, saben nadar a contracorriente y comportarse como socorristas oportunos para que nadie se ahogue. Las parejas se tienden sobre el diván de este barco y se dejan mecer por las olas del tópico y la brisa mas reconocible y superficial. El cineasta de ‘Quiero ser italiano’ parodia sin rumbo y uno tiene que ponerse a remojo en la orilla antes de que la bandera roja nos alerte de que este psicodrama banal nos arrastrará hasta el fondo de su nadería.