Todos los hombres del presidente 1976 136 min. Estados Unidos Director: Alan J. Pakula. Reparto: Robert
Redford, Dustin Hoffman, Jason Robards, Martin Balsam, Hal Holbrook,
Jack Warden, Jane Alexander. Intriga. Sala: Náutica. Filmoteca UC.
Jueves, a las 20 horas.
Si cuento hasta diez y no cuelgas es que sí», rezaba el guiño y la clave
que los periodistas del Watergate utilizaban para hablar con su fuente
sin necesidad de ser más explícitos. Ningún poder mayor que el del
conocimiento. Y de eso se trata. De conocer, de saber, de viajar hasta
las entrañas de la verdad. Periodismo es gente que le dice a la gente lo
que le pasa a le gente. Y de eso va todo, ni más ni menos. El filme de
Alan J. Pakula, ‘Todos los hombres del presidente’, es un thriller
político minucioso y eficaz que casi reinventó ese subgénero sobre el
periodismo de investigación y la tensión entre política y periodismo.
Nunca viene mal acercarse a este desnudo integral, fechado en los
setenta, pero cuyas esencias y raíces permanecen vivas. Ahora la
Filmoteca Universitaria, tras un intenso curso de ciclos que se abrieron
en octubre, culmina mañana su programación con el filme que
protagonizaron Redford y Dustin Hoffman y sirvió de catalizador para
despertar vocaciones y llenar las facultades de periodismo durante años,
hoy simples fábricas de parados a la espera de un gabinete de prensa.
Carl Bernstein y Bob Woodward, del ‘Washington Post’, más famosos que
Fred Astaire y Ginger Rogers, construyen un intrincado camino tras las
pistas que desembocarían en el caso Watergate, que acabó con la
presidencia de Nixon. El guión de William Goldman es un ejercicio de
rigor y detalles y el cineasta Alan Pakula logra, sin más efecto que el
contar las cosas con ritmo y destreza, mantener la tensión y narrar con
pulso sin que decaiga la atención. Filme influyente, su mezcla de
fascinante intriga y lucha de David contra Goliat proporciona una
agitada e inquieta reconstrucción a través de una enredada madeja. Pese
a la complejidad el cineasta de ‘La decisión de Sophie’ busca resquicios
en los que el espectador se enfrente a los hechos pero también sea capaz
de sentir ese estado de fatiga, angustia y vértigo de los reporteros.
Jason Robards, siempre magistral, destaca entre los intérpretes
secundarios. La atmósfera documental no está reñida con el thriller
político ni éste con esa fractura del sistema que asoma entre mentiras,
falsas verdades y relaciones convulsas. Fruto del excelente montaje y
unos diálogos que permiten masticar la acción, el filme de Pakula bombea
la búsqueda de la verdad con lúcido sentido narrativo entre bibliotecas,
redacciones, reuniones y conversaciones. El cine como Garganta Profunda
grita su verdad en esta obra sobria y austera, que en su esencia, la del
compromiso, la libertad de expresión y la búsqueda de la verdad, sigue
intacta y mantiene su trascendente necesidad.