Buena voluntad, pocos resultados. Este es el resumen cabal que Podemos Cantabria hace del año transcurrido desde que Miguel Ángel Revilla se convirtió por tercera vez en presidente del Gobierno regional mediante la abstención pactada entre el PRC y el partido de Pablo Iglesias en la sesión de investidura del 3 de julio de 2015. Podemos da un toque de atención al Ejecutivo de coalición directamente conectado a los Presupuestos de 2017. Si quieren su ayuda, otra abstención como la que sacó adelante las cuentas de este año, tendrán que hacer méritos en el gasto social, y eso que el obligado régimen de austeridad no va permitir muchas alegrías.
Desde el mes de julio y hasta ayer mismo, un grupo de trabajo formado por diez o doce dirigentes y militantes de Podemos, coordinados por Alberto Gavín, ha llevado a cabo de forma intermitente una evaluación de este primer año de legislatura.
El partido morado valora los gestos y las iniciativas parlamentarias que el Gobierno ha alentado en el área de la emergencia social que marcaba el acuerdo de investidura, pero después de un año de gestión observa importantes déficits en materias tan esenciales como la renta básica o la asistencia a las personas dependientes que, a juicio de Podemos, están muy lejos de las expectativas creadas.
Estas son algunas claves del balance que Podemos hará público y presentará al PRC, a su portavoz parlamentario, Pedro Hernando, principal interlocutor durante el proceso de evaluación, y al propio presidente Revilla, si se produce la oportunidad. Bien es verdad que las principales carencias detectadas por Podemos se ubican en el área gubernamental del PSOE, que ha sido y es su gran rival político, pero el pacto de investidura sólo lo suscribió con el líder del PRC, y por lo tanto le hace responsable de la gestión integral del Ejecutivo.
Paralelamente al balance del primer año de legislatura, Podemos prepara su plataforma de prioridades presupuestarias para 2017. Este trabajo todavía no está concluido, pero cabe anticipar que las políticas sociales estarán de nuevo en el primer nivel de exigencia al Gobierno, junto a las medidas que procuren la transparencia en la gestión y el cambio hacia un nuevo modelo productivo sostenible basado en las energías renovables y la I+D+i.
En ese campo tan genérico lo más concreto en la propuesta de Podemos, su voto decisivo para que los Presupuestos 2017 salgan adelante, sigue vinculado a la exigencia de cambio en la dirección de Sodercán, representada por el socialista Salvador Blanco.