Podemos acaba de elegir a sus líderes en los 20 municipios más poblados de Cantabria y esta semana iniciará la construcción de su estructura autonómica para el intenso año electoral que será 2015. Izquierda Unida ha comenzado a transitar la misma senda de las elecciones primarias, si bien su aparato está más consolidado en la región. Ambas formaciones comparten el desafío de demoler el largo monopolio de los grandes partidos (PP, PSOE y en Cantabria también el PRC) y buscan el mismo voto desencantado de la crisis, el paro y la corrupción, pero ya está bastante claro que cada uno va por su lado. Políticos avezados en las lides electorales de los partidos convencionales, de Miguel Ángel Revilla a Gonzalo Piñeiro, opinan desde fuera que las dos fuerzas situadas a la izquierda del PSOE unidas tendrían más éxito en las urnas, pero Podemos no parece predispuesto a aceptar del enemigo el consejo. El partido de Pablo Iglesias se sabe todo lo pujante que auguran las encuestas y no quiere transportar pesadas ‘mochilas’ en su travesía. O sea, temen que IU no sume, sino que reste. Los dirigentes de IU, que eran favorables al acuerdo con Podemos, ahora ya están seguros de que ‘lo que quieren es acabar con nosotros’. Admiten la actual potencia del nuevo partido, pero también identifican sus carencias: si no se presentan con sus siglas a las elecciones municipales es por la debilidad de su estructura política y la falta de candidatos convincentes. Un crecimiento meteórico y de aluvión, describen, y por tanto igual de volátil si se no se cumplen las expectativas con igual velocidad.
En efecto, Podemos no concurrirá con sus siglas a los comicios municipales de mayo, de modo que el papel de los 20 líderes locales recién elegidos, y sus equipos, será de influencia y apoyo a los movimientos ciudadanos y agrupaciones de electores allí donde se produzcan.
En Santander, con una modesta participación abierta de 500 afiliados y simpatizantes, ha ganado la elección interna el aspirante más conocido por su defensa legal de víctimas de preferentes y por su intenso activismo social, el abogado Juanma Brun, y lo ha hecho con gran autoridad, con un 62,6% de los votos, más del doble de los que contabilizó la candidata Rosana Alonso, a quien apoyaban, incluso públicamente, los dirigentes cántabros que forman parte de la cúpula estatal de Podemos.
Brun se mostró en su momento partidario de concurrir a las elecciones municipales con las propias siglas de Podemos, pero esta opción no prosperó frente a la opinión contraria de Pablo Iglesias y su equipo dirigente. En esa tesitura, no es probable que Brun esté en una lista electoral pues ello supondría una cierta contradicción con la estrategia marcada, aunque este capítulo será tratado en el seno del partido. La idea de Podemos Santander es canalizar el descontento que sugieren los diferentes movimientos sociales –de las preferentes a los desahucios, de la senda litoral al Centro Botín– hacia una candidatura emergida de la sociedad civil con personas de trayectorias destacadas y honestas.
Podemos iniciará este miércoles, 7 de enero, el proceso de elecciones internas para la formación del consejo de dirección autonómico, formado por 34 nombres, que a su debido tiempo será la base de su candidatura para los comicios regionales.
Entretanto, Izquierda Unida ha iniciado el proceso de primarias para designar sus candidatos en mayo de 2015. En Cantabria no se han producido –y sus dirigentes lo comentan con alivio– los ruidosos episodios de ruptura y/o deserciones habidos en otras federaciones de afiliaciones más numerosas como Madrid o Andalucía.
De hecho, el actual coordinador de IU Cantabria, Jorge Crespo, no tiene como prioridad liderar la candidatura al Parlamento, sino que se propone reforzar a la coalición en Camargo, donde es concejal. En todo caso, la decisión la tomará antes del 21 de enero cuando dará comienzo el proceso de  primarias autonómicas. En IU se da como probable que se reproduzca la pugna entre las dos tendencias de la coalición de hace trece meses cuando Crespo fue reelegido como coordinador general.
IU calcula que podría haber primarias en unos 25 municipios. El proceso culminará el 15 de febrero. Los eventuales aspirantes deben ser avalados por un 10% del censo de los militantes en cada ayuntamiento. IU tiene en Cantabria unos 250 afiliados activos (al corriente de las cuotas), unos 400 en total.
En Santander ya ha anunciado que concurrirá a la elección interna su coordinador local, Miguel Saro, quien no descarta que tenga competencia para la nominación del candidato a la Alcaldía.
El objetivo de IU es presentar candidaturas en al menos 40 municipios de Cantabria. Ese es justamente el nivel de representación local con el que en 1995 la coalición llegó por primera y única vez al Parlamento de Cantabria, con tres diputados encabezados por Ángel Agudo, el hoy presidente del PSOE de Cantabria.